Unas veces me siento
como una pobre colina
y otras como montaña
de cumbres repetidas.
Unas veces me siento
como un acantilado
y en otras como un cielo
azul pero lejano.
A veces uno es
manantial entre rocas
y otras veces un árbol
con las últimas hojas.
Pero hoy me siento apenas
como laguna insomne
con un embarcadero
ya sin embarcaciones
inmóvil y paciente
conforme con sus algas
sus musgos y peces
sereno en mi confianza
confiando en que una tarde
te acerques y te mires,
te mires al mirarme.
Estados de ánimo
Mario Benedetti